Son localidades distintas y bandos distintos. Pero con coincidencias:
- Los supuestos servidores públicos, se pasan al público por el mismísimo forro.
- Los carroñeros, son carroñeros independientemente de la ideología que profesen. lo que importa es la poltrona.
- Por muy grande que sea la putada que estos sinvergüenzas cometan, siempre habrán imbéciles que les vitoreen.
- Los votos son los que deciden quién gobierna. Hasta que un político encuentra la forma de poner a la democracia en la posición del misionero y darle por donde amargan los pepinos.
- Los discursos previos y posteriores de los que entran y de los que salen, son siempre los mismos; ejemplos de cinismo, mentiras, falsedades, bajeza y demás calificativos que se puedan aplicar a estos carroñeros.
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