lunes, 31 de enero de 2011

TEORÍA DE LA CONSPIRACIÓN II

CONTINUACIÓN

Y, ¿quien es el cocinero?. Descartados los dos especialistas en liarla parda en casa ajena, EEUU y Francia, por que la maniobra va en contra de sus intereses y descartados los sospechosos habituales en hacer saltar cosas por los aires, por que su intelecto no les da más que para apretar un botón, ¿quien queda?.

Israel también tiene un buen número de cabroncetes manipuladores por metro cuadrado, pero sus intereses son los de EEUU.

Y la India, está más preocupada en no descolgarse de China dentro del reducido club de los emergentes, que por tocarles los huevos a los musulmanes.

Tenemos que volver a los guerreros del Islam, pero lo que conocemos de ellos los incapacita para ser la parte intelectual de esta hipotética conspiración. Todo lo que han hecho hasta ahora es impulsivo e irreflexivo. Ni siquiera el 11S se hubiese producido de no haber contado con enormes dosis de suerte; ni siquiera esperaban que se derrumbasen las torres. No hubo continuidad, fue un coletazo aislado cuyo elevado número de víctimas no habían previsto y cuyas consecuencias les han perjudicado más que beneficiado, pues con el tiempo, lo que queda de aquello es que les resulte más difícil moverse por occidente y para nosotros que viajar en avión suponga una tocada de huevos en los controles de los aeropuertos; una pequeña molestia.

Los que ganan las guerras no son los que luchan si no los que las orquestan; solo han de tener paciencia para pasar a recoger el botín. Y en esta obra hay alguien que tiene mucha paciencia y que ha demostrado la suficiente inteligencia para desmarcarse del fundamentalismo y del integrismo a pesar de estar en los orígenes de su creación. La mayoría de occidentales no ha oido hablar de ellos más que de pasada y a raíz de las recientes revueltas, pero en ningún caso disparando alarmas; han tenido paciencia durante años y no van a precipitarse ahora que están cerca de su objetivo.

Se trata de Los Hermanos Musulmanes, traducido literalmente, La Sociedad de los Hermanos Musulmanes. Desmarcados de los actos terroristas únicamente por estrategia para evitar el desgaste. Incluso poniendo en primera fila a musulmanes moderados cara al exterior; distinta estrategia pero igual objetivo que Al-Qaeda: toda la humanidad, libremente o por fuerza, debe de convertirse al Islam.

Esta teoría, no pasa de elucubración paranoica en estos momentos, fruto de una mente retorcida como la mía.

Pero de los acontecimientos de un futuro inmediato, dependerá que esto pase de ser una elucubración mental a una profecía.

Si en las próximas semanas Egipto pasa a manos de La Sociedad de los Hermanos Musulmanes, empezar a preocuparos; y si en los próximos meses tanto en la República Tunecina como en Egipto empieza a implantarse la sharía más conservadora, comprar unas alfombras para el rezo.

Llegados a este punto (hipótesis), habrá que tener en cuenta el posicionamiento voluntario o forzoso de líderes islamistas que a día de hoy rechazan tajantemente la interpretación de la yihad
de "cortemos los huevos a los infieles", como el sudanés Hasan al-Turabi, líder del antiguo Frente Nacional Islámico (actual Congreso Nacional del Pueblo) o como Muhammed Husayn Fadlallah, uno de los fundadores de Hizbullah.

Si llegamos al punto en que musulmanes moderados como ellos dejan de ser un freno al radicalismo y al fundamentalismo, mi consejo será que no viajéis a Israel, pero dejemos eso ahora no vaya a ser que acierte.

Pero esto no deja de ser una elucubración paranoica. ¿O no?.

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